Por Milena García García
Foto: Alexandro
La exposición fotográfica La vuelta al día cubano en ochenta
mundos, del sociólogo austriaco Manfred Krenn, se inauguró este sábado
en la sede de Cuadernos Papiro, con la presencia de Tatiana Zuñiga,
vicepresidenta del Comité Organizador de las 20 Romerías de Mayo.
La apertura estuvo acompañada por un espectáculo exclusivo, preparado por la compañía Codanza, ganadora del Suceso Cultural del Año 2012 en Holguín, el cual se apoyó en la composición musical Mambo Zawirue, del cubano Chucho Valdés.
Tras las palabras inaugurales, en las que Tatiana destacó el interés de Manfred Krenn por mostar la cultura cubana, el trovador Fernando Cabrejas interpretó Canción al desaliento y Fuera de foco, este último el preferido del artista vienés, quien no pudo asistir pero dejó grabadas algunas palabras para los holguineros:
“Disculpen mi conocimiento limitado del idioma cubano. Las fotografías de esta exposición son una forma de la expresión de mi relación intensa y especial con este país y su gente.
“Reflejan un punto de vista de un maldito europeo, como me llaman de vez en cuando algunos de mis amigos cubanos con mucho cariño, bueno un maldito europeo que ama a este caimán verde. Pero la vista de uno de afuera casi siempre ofrece algo nuevo, algo fuera de foco, algo que a la gente que vive aquí no le llama la atención, como nos enseña la historia de la antropología.
“El título de la exposición lo cogí de una frase de Julio Cortázar, ese excelente escritor argentino. Mientras los mundos de Cortázar son más complejos, sorprendentes y surrealistas, los míos se quedan más en la superficie, se refieren a estos que se puede ver con los ojos, que se puede captar con la cámara. Pero me conviene esta frase para expresar que el día cubano, la vida cotidiana, contiene mundos tan ricos y fascinantes que en general toda la gente podría ver pero que no ve porque la vista del ser humano es un censo muy seleccionador, sobre todo lo que se refiere a lo cotidiano.
“Mi exposición tiene la intención de tomar las fortunas de la naturaleza y de la vida cotidiana cubana sumergidas en la oscuridad en la luz diaria con que se cubre la vista desenfocada del hombre, y exponerlas al público.
“En la exposición que hice en Viena con estas fotografías, di también una lectura de textos de Eduardo Galeano, de su “Libro de los abrazos.
“Quiero terminar con una de las frases de ese libro, que el propio Galeano cogió de las murallas en diferentes ciudades de Latinoamérica. Son solo dos palabras que en su simplicidad expresan una cosa muy compleja que vale un mundo: ¡Nos amo!, ¡así de simple, así de complejas, así de maravillosas!
“Cuando yo digo “nos amo” para declarar y describir mi relación muy especial e íntima con Cuba, me refiero en primera línea a una mujer, cubana por supuesto, mar y cielo de la Gran Antilla.
“Pero también y sobre todo me refiero a mis amigos y amigas cubanos. Pero, además, a la gente cubana en general, porque también la sonrisa y la alegría de muchos rostros de todos los colores, y esa melodía única de la lengua cubana, me cambian.
“Nos amo, muchachos y muchachitas. Nos amo, mija, mi vida. Espero que esa relación sumamente especial y cariñosa con la tierra y la gente cubana se pueda ver también en mis fotografías, al menos me llenan de cariño cuando las miro”.
La apertura estuvo acompañada por un espectáculo exclusivo, preparado por la compañía Codanza, ganadora del Suceso Cultural del Año 2012 en Holguín, el cual se apoyó en la composición musical Mambo Zawirue, del cubano Chucho Valdés.
Tras las palabras inaugurales, en las que Tatiana destacó el interés de Manfred Krenn por mostar la cultura cubana, el trovador Fernando Cabrejas interpretó Canción al desaliento y Fuera de foco, este último el preferido del artista vienés, quien no pudo asistir pero dejó grabadas algunas palabras para los holguineros:
“Disculpen mi conocimiento limitado del idioma cubano. Las fotografías de esta exposición son una forma de la expresión de mi relación intensa y especial con este país y su gente.
“Reflejan un punto de vista de un maldito europeo, como me llaman de vez en cuando algunos de mis amigos cubanos con mucho cariño, bueno un maldito europeo que ama a este caimán verde. Pero la vista de uno de afuera casi siempre ofrece algo nuevo, algo fuera de foco, algo que a la gente que vive aquí no le llama la atención, como nos enseña la historia de la antropología.
“El título de la exposición lo cogí de una frase de Julio Cortázar, ese excelente escritor argentino. Mientras los mundos de Cortázar son más complejos, sorprendentes y surrealistas, los míos se quedan más en la superficie, se refieren a estos que se puede ver con los ojos, que se puede captar con la cámara. Pero me conviene esta frase para expresar que el día cubano, la vida cotidiana, contiene mundos tan ricos y fascinantes que en general toda la gente podría ver pero que no ve porque la vista del ser humano es un censo muy seleccionador, sobre todo lo que se refiere a lo cotidiano.
“Mi exposición tiene la intención de tomar las fortunas de la naturaleza y de la vida cotidiana cubana sumergidas en la oscuridad en la luz diaria con que se cubre la vista desenfocada del hombre, y exponerlas al público.
“En la exposición que hice en Viena con estas fotografías, di también una lectura de textos de Eduardo Galeano, de su “Libro de los abrazos.
“Quiero terminar con una de las frases de ese libro, que el propio Galeano cogió de las murallas en diferentes ciudades de Latinoamérica. Son solo dos palabras que en su simplicidad expresan una cosa muy compleja que vale un mundo: ¡Nos amo!, ¡así de simple, así de complejas, así de maravillosas!
“Cuando yo digo “nos amo” para declarar y describir mi relación muy especial e íntima con Cuba, me refiero en primera línea a una mujer, cubana por supuesto, mar y cielo de la Gran Antilla.
“Pero también y sobre todo me refiero a mis amigos y amigas cubanos. Pero, además, a la gente cubana en general, porque también la sonrisa y la alegría de muchos rostros de todos los colores, y esa melodía única de la lengua cubana, me cambian.
“Nos amo, muchachos y muchachitas. Nos amo, mija, mi vida. Espero que esa relación sumamente especial y cariñosa con la tierra y la gente cubana se pueda ver también en mis fotografías, al menos me llenan de cariño cuando las miro”.
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