viernes, 4 de mayo de 2012

Chorreo armónico de Romerías

Por Elizabeth Bello Expósito
Tomado de www.ahora.cu

Vienen desde la hermana nación de Costa Rica y llegan hasta Holguín, a estas XIX Romerías, con un “chorreo armónico de crímenes” artísticos. Son un grupo de siete jóvenes y juntos forman el Círculo de Artistas Emergentes Costarricenses.

Wesley Acuña, Erick Bustamante, Víctor Ulloa, Camilo Bolaños, Paulo Navarro, David Garringuez e Irella, la única chica son los siete protagonistas de este círculo de artistas y que, tras conferencia de prensa, bandera nacional al hombro, dedicaron a dialogar sobre sus proyectos e impresiones.

Primero, lo primero...

-Nosotros nos conocimos en la universidad y fue así como hace dos años, a raíz de un viaje que hicimos para una exposición en Granada, surge el Círculo de Emergentes Costarricenses, que es un proyecto de gestión cultural autónomo.

Su razón de ser es la divulgación, conexión y participación en diversos espacios culturales y artísticos, no solo de Costa Rica, sino del resto de la región centroamericana, para impulsar y divulgar la obra de artistas emergentes, de los jóvenes creadores y propiciar intercambio cultural y profesional, en el campo de la plástica y el arte. Actualmente somos el grupo cultural más activo de nuestro país y esperamos seguir avanzando.

La obra...

-En nuestros trabajos empleamos tanto lenguajes tradicionales, como el dibujo, la pintura, la escultura, la cerámica, la fotografía y el grabado, como tendencias de vanguardia, como la instalación, el graffiti, el mural y el video arte.
Chorreo Armónico de Crímenes, agrupa obras realizadas, desde el espíritu individual de cada uno de nosotros y que pretende causar una ruptura y mostrar una mentalidad crítica, hacia la vida.

Impresiones...

-Para nosotros representa una excelente oportunidad venir e interactuar con las demás personas de todo el mundo, que están aquí y  vivir la experiencia de enfrentar nuestra obra con un público diferente.

Nos llevamos lo vivido. Sí, porque lo que se vive aquí es una experiencia aparte y nos ha marcado. Realmente nos sentimos como en casa, pues el calor humano que se percibe es excepcional. Cuba y Costa Rica se parecen en eso, en la solidaridad y la humildad. Es muy fácil enamorarse de este pueblo y de las gentse. Nos encantaría volver.

No hay comentarios:

Publicar un comentario